Todavía mantengo fresca la frase con la cual me haces reir (porque sin duda no es cierto) y a la vez me da verguenza porque lo dices con tal certeza y frescura que mucha gente debe de pensar lo mismo. “Chino, eres un figuretti”... tema para discusión, indudablemente. Hasta podría demandarte ante los tribunales: No soy chino... soy descendiente de japonés y... figuretti... bueno.... no? Verdad? ... porque, si fuese como dices tú, mi querida amiga del alma, que por salir en todas, casi todas las fotos de la promoción me pones el cartel de figuretti... tendriamos que ponernos muchos ese cartel...
De aqui que proviene una historia como muchas. Con gente como pocos.
Cada recreo, era más que eso!...el simple hecho de saber que iria a suceder en esos escasos minutos de libertad ya nos hacia sentir mas relajados. Que no habran visto estos ojos (Ana, no soy chino...) cada cosa!, una más divertida que la otra. Dignos de haber sido filmados bajo el lente de Big Brother.
Una de las cosas que casi medio salón de la promoción comentamos hasta ahora es acerca de las fotos del colegio. Como no recordarlo!, cada vez que veiamos al fotógrafo ¿oficial? del reclutorio le pediamos que nos saque una foto... todo mundo se empujaba por salir en la foto... era una lucha feroz, los de los lados con miedo a salir por la mitad apretaban mas a la multitud del medio. El fotógrafo con sonrisa kolynos nos sacaba incluso mas de una toma: “no vaya a salir movidita mi amigo”.. claro que la sonrisa no era solo porque le gustaba su ocupación, sino también porque obviamente que la foto le daría grandes entradas a su economía. Simple, Matemática pura..o sino que me corrija Luis Román (actualmente profe de Mate.)... saquen calculadora (ya no es lápiz ni papel) ... a ver: un par de tomas en un rollo de 36, que bien sabemos que vienen 37 o a veces 38 ? nada mal para un negocio, casi cero pérdida; multiplicados por treintaitantas copias para cada uno que posó para la cámara: un golazo! Uyayay! Se relamia de solo pensar cuanto sacaría !! Ahí era el punto donde pecaba de avaro (cuidado! Pecado capital señor fotógrafo) y concluia con la frase: ¿Porqué tirar sólo un par de tomas, si puedo tomar muchas más y multiplicar más y más y más...$$$$$.
Para nosotros no era ninguna molestia posar ante los flashes, incluso habian veces que ya estaban por formarse al finalizar el recreo y nosotros seguiamos en el casting de castings. Era tan contagiante que hasta de otros salones también empujaban por entrar ¿?. Ese momento era celestial, si! Sin duda! En ese momento hasta se podian abrazar el, perro, el gato y el ratón... que San Martín ni San Martín... el camera-man del reclutorio y punto!
Pasaba casi una semana para poder ver las fotos... eso era mejor que posar! Nos daba el mazo de fotos para escoger (escoger? Jajaja) y nos pasabamos viendo todas las tomas, los empujones retratados y hasta era un juego tratar de reconocer diferentes personajes que se metian de refill. Era una especie de ¿Dónde está Wally?..entienden? El camera man también se reia a carcajadas con nuestras ocurrencias, apodos, rajes, etc... todo era un paraíso hasta que se rompia con una pregunta: Bueno muchachos, ¿Cuantas copias quiere cada uno? ... Bueno eso nosotros lo escuchabamos como: Rompan filas, Viva el Perú!!!... y cada uno salia volando a donde sea.
Escena triste (con fondo musical del chavo en Acapulco cuando lo dejan) , estaba el cameraman arrepentido (por tomarnos las fotos), con su mirada tan tierna, su bolsillo partido y la cámara entre las piernas. FIN (por hoy claro! Mañana.... mas fotos muchachos!!!)
Enseñanza del cuento: la avariacia es mala.
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